Los pasos a seguir a la hora de construir
una vivienda con criterios de
Bioconstrucción son:
- Análisis personalizado del proyecto de
vivienda que el cliente nos pide desarrollar,
teniendo presente no sólo sus necesidades
presentes sino también prever las futuras.
- Desplazarnos al terreno: estudiar su orografía,
clima y recursos naturales que posee
(agua, sol, viento, tierra, vegetación, etc.),
construcciones adyacentes, estilos culturales
de la región, su estructura geobiológica,
(para ello podemos alquilar por un día un
geomagnetómetro, un medidor de radiofrecuencias,
una brújula y un contador geiger
o bien requerir los servicios de un geobiólogo
o de un radioestesista). Debemos evitar
la proximidad de tendidos eléctricos de alta
tensión y transformadores, así como las fallas
o corrientes de agua subterránea.
- Con todos estos datos podremos determinar
la ubicación, las necesidades constructivas,
la forma de la obra, la aplicación de
la bioclimática en función de su situación
geográfica y clima (realizando una buena
distribución de los espacios) y energías renovables
(solar, eólica, hidráulica, geotérmica,
etc.) tanto pasivas como activas (que suelen
tener sus mejores resultados en una aplicación
combinada), la producción de A.C.S.
(agua caliente solar) por sistema solar-térmico
es viable en todo el territorio español,
así como los sistemas y ciclos de
reutilización y depuración de las aguas.
- Criterios que debemos tener presentes a
lo largo de toda la obra:
EL AHORRO ENERGÉTICO debe ser
la constante permanente tanto de la ejecución
de la obra, como del futuro uso
de la vivienda (iluminación natural, bombillas
de bajo consumo, climatización natural
por sistemas hidro-vegetales+sombra, sistemas
solar-pasiva, ACS mediante colectores
solares, etc..).
RECICLAR-REUTILIZAR. Los materiales
para realizar la construcción deberán ser
de materia prima lo menos elaborada posible,
encontrarse lo más cerca posible de la
obra y totalmente exentos de elementos
nocivos como asbesto, cloro, plomo y más
concretamente PVC tan común hoy en día,
evitando los metales pesados, escorias siderúrgicas,
etc... y los susceptibles de emitir
gases nocivos. Los procesos de extracción
de la materia prima y su posterior elaboración-
manipulación así como su consumo
energético serán de primordial
consideración. Allí donde se
precise de frío industrial o
doméstico se aplicará el sistema
“Greenfreeze” (c/propano).
En los elementos estructurales
se utiliza a menudo el cemento
tipo Portland o cangrejo y otros,
los cuales pueden ser sustituidos
por cementos naturales o
cal hidráulica. El uso de acero
debe restringirse a lo imprescindible
(y lo derivaremos a
tierra). No debemos despreciar
el salvar grandes luces con arcos
y aplicando la cultura de la cal
para ganar plasticidad e impermeabilidad
en los morteros. En la carpintería
se viene utilizando habitualmente el
aluminio y el PVC, los cuales en los criterios
de bioconstrucción serán erradicados
tanto por su elevado coste de producción
como por su nocividad.
La aplicación de la bioclimática no tiene
por qué ser muy complicada (por ejemplo,
con muros trombe regulados por domótica).
Puede desarrollarse con una buena orientación,
distribución adecuada de los espacios,
aleros bien estudiados, grandes acristalamientos
al sur con paredes y suelos de alta inercia
térmica (compactos+oscuros+mates), estancias
de poco uso al norte (garajes, despensas,
etc.). No debemos despreciar el uso de masas
arbóreas y arbustos para derivar los vientos
y amortiguar el ruido así como árboles de
hoja caduca que pueden cumplir una buena
función dando sombra en verano y dejando
pasar el sol en invierno. Espacios sombreados
con elementos vegetales e incluso una
pequeña cascada o fuente pueden generar
un ambiente muy saludable regulado en
temperatura, humedad e ionización.
En la construcción evitaremos los morteros
químicos, impermeabilizantes, bituminosos,
láminas, conductos y perfiles de PVC o de
aluminio, elementos con amianto, fibrocementos,
aislamientos elaborados con polímeros
y de poro cerrado (mucho mejor el
corcho, fibras vegetales, la lana de oveja o
viruta tratadas, por ejemplo, con sales bóricas),
etc...
En el diseño de los dormitorios tendremos
presente el orientar la cabecera al norte, evitaremos
que las instalaciones de fontanería
o electricidad crucen la cama, evitaremos
la proximidad de electrodomésticos a la
misma así como la instalación de moquetas.
Es imprescindible dar la importancia adecuada
al descanso, para lo cual se debe evitar
cualquier elemento susceptible de contaminar
química o energéticamente la estancia.
Los elementos excesivamente rectilíneos y
con esquinas pronunciadas crean un impacto
muy desagradable y las corrientes de aire así
como las ondas de forma se ven obligadas
a encontrarse bruscamente en corriente y
contracorriente.
Los conductos de saneamiento de gran diámetro
pueden ser de cerámica con conexión
de caucho y los de pequeño diámetro de
PE-AD (polietileno de alta densidad) o
PP (polipropileno) en lugar de PVC como
viene siendo habitual; las conducciones son
más estables, flexibles, duraderas y menos
ruidosas. También existen ya en el mercado
cables libres de halógenos y sin PVC para las
conducciones eléctricas.
La reutilización de las aguas es primordial.
La evacuación de las aguas de la cocina debe
pasar a través de un separador
de grasas para una mejor asimilación
de los residuos y poder
tratarlas con eficacia junto con
el resto de aguas residuales, por
ejemplo mediante un sistema
primero anaeróbico y posteriormente
aeróbico, seguido de
un filtro biológico PERCOLADOR
(con piedra volcánica,
puzolana o biosint) y así poder
reutilizar el agua para riego,
abrevaderos, estanques, etc. También
deben ser tenidas en consideración
las aguas pluviales para
su recogida y distribución en
riego, inodoros, lavabos, abrevaderos,
etc. En los lugares donde escasee el
agua los inodoros pueden ser del tipo WCSECO,
en los cuales no se utiliza agua y la
materia orgánica se composta y posteriormente
se utiliza como abono.
Para los elementos decorativos, tratamientos
de madera o de enfoscados, debemos buscar
pinturas al silicato, al agua, aceite de linaza,
colofonia, ceras naturales, etc.
A la vivienda debemos darle la consideración
de nuestra tercera piel, por lo que debe
ser transpirable.